sábado, 16 de marzo de 2013

Papás, va por vosotros!

Buenos días mamis!



Aprovechando que se acerca el día del padre me gustaría dedicar una entrada a esa figura que tanto ha cambiado en las últimas décadas, afortunadamente. Y digo afortunadamente porque si bien los padres de antes querían a sus retoños tanto como los actuales, es cierto que los cuidados y atenciones diarias eran cosa de las madres. Por eso se repite tanto esa frase de que "Los abuelos hacen con los nietos lo que no hicieron con sus hijos". Y tal vez se entienda esa pasión incontrolable por los nietos, porque se perdieron tanto de su crecimiento 30 años atrás que ahora, jubilados, quieren vivir a tope esa etapa. Pero volvamos a los papis que los abuelos ya tuvieron su ración de protagonismo en este Blog :-P

Ahora los padres saben cambiar pañales, llegan de trabajar y bañan a sus hijos, les dan de comer, los acompañan al pediatra siempre que pueden, los sacan de paseo... Si, esto no tendría que ser noticia ni motivo de mención porque las madres hacemos todo esto y también les compramos la ropa, la lavamos, les arreglamos la habitación, los llevamos a piscina, organizamos sus fiestas de cumpleaños, compramos las verdutitas, frutas y la mejor carne para sus papillas y además mantenemos la casa, trabajamos y un largo etcétera que no es para aburrir. Aún y así, reconocemos que nuestras parejas se implican en la crianza diaria de nuestros hijos mucho más de lo que nuestros propios padres hicieron con nosotros puesto que aquello era cosa de las madres, que para eso no trabajaban fuera de casa y se dedicaban en exclusiva "al hogar".

Con todo esto he de decir que, como en todas las cosas, hay gente de todos los colores y padres de todo tipo. Los hay con un instinto paternal brutal y los hay que no tienen ese apego tan grande aunque intentan comprometerse lo máximo que pueden. Hasta hace poco, el 90% de los niños tenían mamitis. Es evidente que la conexión entre una madre, sobre todo las que amamantan, y sus hijos es absolutamente poderosa. Eso unido a que la madre, que ya comienza enganchada a su bebé 4 meses enteros, se involucra en todo lo que respecta a la criatura, pues da como resultado un apego fuertísimo entre madre e hijo. Pues bien, a medida que los niños se "independizan" de las brazos de mamá, los hay que se van acercando más a sus padres. Unos padres que, como he dicho antes, ahora quieren vivir intensamente cada paso que de sus criatutras. Otra cosa son los papás que por trabajo viajan de lunes a viernes y se pierden el día a día de los pequeños y han de aprovechar cada minuto del fin de semana para recuperar el tiempo perdido. También entonces pueden lograr una complicidad fabulosa con sus peques Esto ha dado casos de papitis. Así que ahora tenemos mamitis y papitis. Para nosotras es algo natural y nada raro.

El rol de papá también ha cambiado en casa. Ha pasado de ser básicamente la autoridad de la família, el de las grandes decisiones, a ser una figura afectiva indispensable para el niño. Papá también se tira al suelo jugando, prepara la papilla, pone Clan TV y se pasa el tiempo haciendo fotos al peque con el teléfono. Verdad que antes muchos papás llegaban, se cambiaban y se sentaban en el sofá a ver las noticias? Ahora ya no hay poli bueno o poli malo en casa porque tanto mamá como papá pueden regañar o ser cómplices según la ocasión. Por cierto, vi no hace mucho una tira cómica en la que salían las figuras de un papá lanzando al aire a su pequeño y según quién mirara, el peque estaba más alto o más bajo. Mamá era la que lo veía más alto porque era la que sufría más. Pues he de decir que hay papás sufridores, muuuuy sufridores! Yo misma tengo uno en casa y menos mal que entre los dos equilibramos nervios ;-)

Pues bien, en tres días es el día del padre y qué mejor manera de celebrarlo que disfrutando de ese tiempo que ahora pueden y quieren compartir con sus hijos. Tiempo para aprender unos de otros y de crecer. Porque hay tantas cosas que nos pueden enseñar nuestros hijos...

Besos

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